Si hay bebés, niños pequeños, mujeres embarazadas o personas vulnerables en la casa y necesitas contratar un servicio de fumigación, desinsectación o desratización, debes tomar al menos las siguientes precauciones:
- Las mujeres embarazadas, bebés, niños pequeños, adultos mayores y personas vulnerables deben retirarse de la propiedad durante la aplicación del pesticida.
- Esperar al menos 6 horas después del procedimiento de fumigación, desinsectación o desratización antes de regresar a la propiedad.
- Evitar la inhalación y/o el contacto directo con las sustancias plaguicidas.
- Solicitarle a la empresa de control de plagas la información técnica de las sustancias pesticidas (componente activo, nombre comercial, concentración utilizada, etc.)
- En caso de presentarse cualquier síntoma adverso, acudir inmediatamente al médico o profesional de salud con la información técnica de la sustancia pesticida aplicada.
En este artículo te presentamos más información sobre las medidas que debes tomar para proteger la salud de tus familiares y seres queridos durante un proceso de fumigación, desinsectación o desratización de tu propiedad.
¿Puedo usar un pesticida si estoy embarazada o tengo un bebé en la casa?
Sí, se pueden usar pesticidas si estás embarazada o tienes un bebé en casa. Pero es muy importante seguir las recomendaciones que te hemos dado: evitar por todos los medios la exposición al pesticida. La aplicación del pesticida la debe hacer otra persona.
Por medidas de seguridad, las mujeres embarazadas, bebés, niños pequeños, adultos mayores, personas alérgicas, con complicaciones de salud o cualquier otra vulnerabilidad no deben estar presentes durante el proceso de fumigación y deben esperar unos días, o por lo menos 6 horas, antes de volver a la propiedad.
Todos los pesticidas tienen algún grado de toxicidad y presentan un peligro durante el embarazo. Ahora bien, el nivel de peligrosidad está relacionado con la toxicidad de las sustancias utilizadas y la cantidad de pesticida a la que tú y el bebé pudieran estar expuestos durante el procedimiento de control de plagas.
Si sigues las recomendaciones antes mencionadas, no deberías tener problemas con el embarazo, ni el procedimiento de control de plagas debería afectar la salud de tu bebé.
¿Fumigar afecta el embarazo?
Sí, algunos estudios señalan que la exposición a pesticidas durante el embarazo o en niños recién nacidos puede afectar gravemente el sistema nervioso y otros órganos (hígado, riñones, etc.) de los bebés, entre otros efectos adversos.
De nuevo, la recomendación de Fumivenca es evitar por todos los medios la exposición de los bebés, niños pequeños y mujeres embarazadas a los pesticidas. Sin embargo, es muy importante poner todo en contexto.
Los estudios se han realizado en personas con gran exposición a los pesticidas, por ejemplo:
- Trabajadoras de fábricas o almacenes que están expuestas constantemente a productos químicos o sus emanaciones (vapores, polvos, etc.) o a tratamientos frecuentes de control de plagas en el lugar de trabajo.
- Personas que viven cerca de plantaciones que son fumigadas intensivamente con pesticidas de forma frecuente.
- Personas que viven cerca de instalaciones industriales con efluentes tóxicos no controlados adecuadamente que contaminan el aire, agua y suelo.
- Personas que trabajan en la industria agroalimentaria y están en contacto con plantaciones fumigadas o animales de cría (agricultores, veterinarios, jardineros, cuidadores de ganado, transportistas de estos rubros, etc.)
- Personas que trabajen como aplicadores de pesticidas.
Una persona que simplemente está fumigando su hogar, que contrata a una empresa responsable, y que sigue las indicaciones que hemos dado (no estar presente durante la aplicación del pesticida y esperar un tiempo prudencial antes de regresar a la propiedad), no se expone a las sustancias tóxicas y por lo tanto no debería existir ningún riesgo para su salud y bienestar.
¿Cómo afectan los plaguicidas a los niños?
Los plaguicidas afectan a los niños y a los bebés principalmente de las siguientes formas:
- El sistema nervioso: ocasionan daños al cerebro y al tubo neural.
- En los órganos: como el hígado y los riñones, afectando las funciones metabólicas y el filtrado de la sangre.
- El sistema respiratorio y la piel: por inhalación y/o contacto directo con las sustancias tóxicas.
- Alergias: se pueden desarrollar estos efectos adversos si el bebé es alérgico a algún componente del pesticida.
Una vez más, es muy importante poner todo esto en el debido contexto: los pesticidas son agentes de control específicos para cada tipo de plaga.
De este modo, un insecticida (para control de insectos) o un acaricida (para control de arácnidos) no debería hacerle daño a un ser humano, independientemente de su edad, en las dosis de aplicación comercial normales.
En cambio, los rodenticidas o raticidas (para control de ratas, ratones y roedores en general) son letales para todo tipo de mamíferos, incluyendo mascotas (perros, gatos, conejos, hámsteres, etc.) y seres humanos de todas las edades.
En este sentido, si se fumiga la casa contra ratas y ratones, deben tomarse medidas de precaución incluso mucho más rigurosas para proteger la salud del bebé que cuando se fumiga contra hormigas, cucarachas o insectos voladores.
¿Los plaguicidas afectan más a los niños que a los adultos?
Sí, de acuerdo con el Centro Nacional de Información sobre Pesticidas de los Estados Unidos (NPIC), los plaguicidas afectan a los niños con mayor intensidad que a los adultos, incluso si tienen el mismo grado de exposición al pesticida, por las siguientes razones:
- Los bebés y niños pequeños tienen más superficie de piel en relación a su peso corporal que los adultos, por lo tanto, mayor riesgo de intoxicación por contacto y absorción cutánea.
- Los bebés y niños pequeños realizan más respiraciones por minuto que los adultos, lo cual significa que, incluso expuestos a la misma aplicación de pesticidas, pueden absorber más rápido una mayor cantidad de sustancias tóxicas en relación a su peso corporal que un adulto.
- Generalmente los bebés y niños pequeños gatean y juegan en el suelo, alfombras o jardines, cerca de los lugares donde usualmente se aplican los plaguicidas, lo cual aumenta considerablemente el riesgo de exposición y contaminación.
- Los bebés y niños pequeños normalmente comen y beben más en relación con su peso corporal que los adultos, lo que puede conducir a una mayor dosis de plaguicida por kilogramo de peso corporal.
- Los bebés y niños pequeños con frecuencia se frotan los ojos y se llevan las manos o los objetos a la boca, lo cual también aumenta el riesgo de intoxicación.
- El cerebro, el sistema nervioso y los órganos de un bebé aún están en desarrollo después del nacimiento y por lo tanto son mucho más vulnerables al efecto tóxico de los pesticidas.
Insecticida no tóxico para bebés
Los insecticidas no tóxicos más efectivos o recomendados a aplicar como tratamiento son aquellos empleados a base de gel o mediante trampas con feromonas.
Si se presenta un caso de plaga de hormigas, cucarachas o insectos voladores (los más comunes en propiedades residenciales) estos dos procedimientos o remedios son los menos nocivos que posee la desinsectación tradicional, puesto que no son tóxicos para los humanos.
De este modo, se puede llevar a cabo en la vivienda en la medida en que no supone ningún problema para los niños ni para mujeres embarazadas, siempre que las trampas y el gel sean puestos en lugares que estén fuera del alcance de los niños, para que no tengan ningún tipo de contacto con el producto.
Recomendaciones generales
Se recomienda evitar el uso de insecticidas en aerosol puesto que respirar el vapor del aerosol puede ser nocivo y también estas sustancias químicas pueden presentar riesgos para su familia si se utilizan incorrectamente.
El uso seguro de estos productos requiere que todas las personas y mascotas abandonen el lugar a tratar y se cierren las puertas luego de descargar el insecticida en aerosol.
Evite ingresar al lugar fumigado hasta que haya transcurrido el tiempo indicado, (entre dos y seis horas). El ingreso a la propiedad o recinto antes de tiempo puede provocar reacciones alérgicas, intoxicación y otros daños a la salud.
¿Qué pasa si mi bebé huele veneno / insecticida?
Como ya se ha dicho, los bebés y niños pequeños son más vulnerables que los adultos y, además, las toxinas del pesticida no sólo se absorben mediante la inhalación del aerosol, polvo o vapor, sino también mediante la boca o la piel.
La exposición no produce síntomas de intoxicación inmediata, pero si su bebé o niño pequeño presenta los siguientes signos o síntomas:
- Dolor de cabeza
- Mareo o debilidad
- Contracciones musculares
- Dificultad para respirar
- Sarpullido/brote en la piel
- Ardor en los ojos
- Escalofríos
- Fatiga
- Cambio general del nivel de atención o agudeza mental
Debe llevarlo inmediatamente al médico porque estos son signos y síntomas que indican que su bebé puede estar intoxicado. De nuevo, es importante aclarar que uno sólo de estos síntomas no es una señal concluyente de intoxicación.
Pero la ocurrencia de varios de estos signos o síntomas después de la aplicación de un plaguicida es una señal muy importante de que su bebé puede estar intoxicado y debe ser atendido con seriedad y rapidez.
¿El Raid ® es dañino para los bebés?
Sí, este producto es dañino para los bebés. Pero, en primer lugar, debemos aclarar que Raid ® es una marca comercial de la empresa SC Johnson, la cual produce y distribuye numerosos productos químicos a nivel mundial, entre ellos insecticidas.
La empresa SC Johnson, en sus distintos portales web en diferentes países del mundo (entre ellos Argentina, Colombia y México), publica información sobre el uso adecuado y composición química de sus productos, y las precauciones que debe tener el usuario al utilizarlos.
De este modo, los productos de la línea Raid® tienen como compuesto activo a la Praletrina, el cual es un pesticida del grupo químico de los Piretroides, con un grado de toxicidad importante para los humanos de todas las edades.
Mi bebé chupó una pastilla Raid®
Si su bebé chupó una pastilla Raid® debe llevarlo inmediatamente a evaluación médica. Las pastillas Raid®, según la información técnica de sus componentes activos, son productos nocivos por ingestión y tóxicos por inhalación.
¿Qué hacer en caso de que el bebé presente síntomas de envenenamiento?
Si un bebé o niño pequeño presenta síntomas de envenenamiento por ingestión de sustancias tóxicas, usted debe actuar rápidamente. En estos casos, la organización Healthy Children (Niños Saludables) recomienda:
- Mantener la calma
- Alejar al niño o bebé del objeto o artículo tóxico.
- Si el niño todavía tiene parte del producto en la boca, haga que lo escupa o sáqueselo de la boca con sus dedos.
- Mantenga este material junto con cualquier otra cosa que pueda ayudar a determinar qué se ha tragado el niño.
- No haga vomitar al niño puesto que esto puede causarle más daño.
- Si el niño está inconsciente, no respira, tiene convulsiones o temblores, llame de inmediato al número de emergencia local.
Adicionalmente, debe suministrarle al personal médico toda los datos posibles, tales como:
- Edad del niño
- Cualquier condición médica que tenga el niño.
- Cualquier medicina que esté tomando su hijo.
- El nombre de la sustancia que su hijo se tragó (se recomienda entregarle al personal médico la caja, empaque, envase o etiqueta del producto).
- La hora en que su hijo se tragó el veneno (o el momento en que encontró al niño), así como la cantidad que usted cree que se tragó.
En este sentido, no es recomendable el uso de insecticidas, en ninguna de sus presentaciones (ni aerosol, ni pastillas ni espirales), en la habitación donde están los bebés o niños pequeños.
¿Se puede usar espiral / pastillas para mosquitos con bebés?
Los espirales, elementos que comúnmente se usan en los hogares para evitar las picaduras de los mosquitos, están contraindicados para su uso en habitaciones donde estén los niños o bebés. Del mismo modo los aerosoles y las pastillas.
Esto es aún más delicado cuando hay bebés o niños que son asmáticos o hiper reactivos bronquiales, que presentan cuadros de broncoespasmos a repetición, puesto que toda sustancia química extraña que el niño inhale es un disparador para desencadenar una crisis de asma o alergia.
¿Qué pasa si respiro la fumigación?
La mayoría de las sustancias para fumigar son altamente tóxicas, por lo que respirar incluso pequeñas cantidades puede ser perjudicial para la salud.
La exposición leve a la inhalación puede causar una sensación de mareo, zumbido en los oídos, fatiga, náuseas y opresión en el pecho. El aire fresco generalmente alivia estos síntomas.
La exposición por inhalación moderada puede causar debilidad, vómitos, dolor de pecho, diarrea, dificultad para respirar y dolor justo por encima del estómago.
Los síntomas de exposición severa por inhalación pueden ocurrir desde unas pocas horas hasta varios días después de la exposición. El envenenamiento severo puede provocar mareos, color de piel azul o púrpura, pérdida del conocimiento e incluso la muerte.
De ahí que los médicos proceden a un seguimiento del paciente afectado para detectar una posible insuficiencia respiratoria y administrar tratamientos para mantener la respiración y la funcionalidad cardíaca.
¿Cuánto tiempo hay que esperar después de fumigar?
Lo mínimo que debe esperar para volver a la propiedad que ha sido fumigada, desinsectada o desratizada son seis horas (6).
Del mismo modo, se aconseja lavar muy bien cualquier vestimenta que pueda llegar a tener contacto directo con los químicos que pueden absorber las telas, incluso al estar guardadas en closets o cajones.
Por último, debe seguir siempre las recomendaciones de seguridad de los especialistas en la aplicación de pesticidas y control de plagas. Recuerde que es mejor prevenir que lamentar.
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¿Bebés en casa y necesitas fumigar? Aprende las precauciones cruciales para mantener a tus pequeños resguardados. ¡Comunícate con nosotros para que tengas un ambiente libre de plagas y seguro para tu familia!
